Voluntad de conciencia

Escuchando una vez más esta mañana, la entrevista telefónica concedida por Omara Ruiz para radio Martí no pude evitar sentir una gran tristeza pero al mismo tiempo me sorprendí sonriendo: recordaba al fallecido tirano Castro (aclaración: le llamaría “Tirano original” para diferenciarlo de su hermanito menor, pero es que aquel señor no fue original ni siquiera en tiranía.)
Pues bien, recordaba su tan gastada frase “voluntad inquebrantable”(algo que él nunca pudo lograr de ninguno de sus comunistas durante todo el tiempo que estuvo en la “presidencia”) y sin embargo esa misma voluntad es la que muestran Ariel y Omara.

El Doctor en Ciencias Biológicas Ariel Ruiz Urquiola y su hermana Omara han sufrido a manos del régimen de Cuba. Han sido amenazados, humillados y socialmente aislados de cualquier tipo de posibilidad de avanzar en una sociedad corrupta por un sistema político caduco e injusto.

En un intento desesperado del régimen por acallarlos, trazaron una estrategia sucia para poner en privación de libertad a Ariel. Grave error. El movimiento social que esta injusta acción está suscitando es casi sísmico y no fue obviamente calculado por el régimen comunista de Cuba. La opinión pública internacional cada vez más va siendo consciente de la situación de este caso con lo cual ha nacido un nuevo concepto de lo que está pasando en Cuba a un nivel peligroso. Ya no le quedan al régimen muchas más historias de hadas que contar: la figura de Ernesto Che Guevara va dejando de ser un símbolo de rebeldía y justicia para dar paso a la verdad. Para convertirse en la figura de lo que siempre fue: un ser injusto, inconformista sanguinario y despiadado. Las frases de José Martí que tanto han tratado tergiversar durante más de 50 años no les sirven de nada porque de ninguna manera se han adaptado al sistema social totalitario que han querido en vano representar como justo.

Ariel y Omara no se han doblegado. No lo consiguieron cuando expulsaron a Ariel de la Universidad de La Habana y trataron de manchar su reputación como científico. No lo han conseguido ahora, después de condenar a Ariel a un año de privación de libertad por sencillamente exigirle a dos testaferros del régimen que fueron a acosarlo que se identificasen y llamarlos por lo que son: GUARDIAS RURALES.

El sistema intestinal del régimen se mueve inquieto sabiendo que no han conseguido acallar a Omara Ruiz, quien sigue luchando por hacer conocer la verdad de lo que pasa en Cuba y denunciar cada abuso y violación que se comete contra su hermano a pesar de que han boicoteado su tratamiento para el cáncer en más de una ocasión. Omara sabe que además de retrasarle la administración de su medicamento, en al menos dos ocasiones le han administrado placebos (solución salina u otro líquido inútil para su caso). Lo sabe porque una vez que el tratamiento es alterado, los indicadores de empeoramiento comienzan a aparecer, los resultados de los laboratorios se alteran mostrando un deterioro evidente. Las manifestaciones en piel, etc, hacen también su aparición.

Pero todo eso no le ha servido de nada al régimen comunista y sí mucho al pueblo de Cuba: La verdad sale a flote cada vez más. El aparato propagandístico del gobierno, como le sucedió a cada central azucarero de la isla, va mostrando su evidente desgaste y ya no hay piezas de repuesto para algo tan obsoleto.
Cuba se va poniendo de pie comenzando por su conciencia y el mundo va despertando del letargo que causan las quimeras del opio comunista.

¡¡¡Despierta Cuba!!! ¡¡¡Ponte de pie!!!

Dr Jorge Gonzalez
Un cubano mas.