Ayer viernes 28 de Septiembre de 2018, en el Aula Magna del Seminario de San Carlos sito en la calle Cuba, cerca a la Avenida del Puerto en la Habana Vieja, a las 3:30 pm se dió lugar un debate de la nueva “Constitución” a la que asistió el público verdadero, o al menos aquéllos que supieron de tal evento. Según nos cuenta nuestro amigo Oscar Antonio Casanella Saint-Blancard, quien asistió a dicho debate:
“(…) No hubo censura, y los agentes de la seguridad del estado estuvieron presentes pero no actuaron, solo fueron a recoger información y a identificar al público y a los participantes.”
Oscar nos detalla:
“Todas las
intervenciones fueron fuertes y frontales contra un estado totalitario, reconociendo que no hay estado de derecho. Yo participé, pude
hablar y desahogarme un poco en público y hacer unas preguntas a los expositores quienes respondieron pobre y tristemente, porque ellos mismos no me podían hablar
claro, no podían decirme explícitamente
que “eso” no era una constitución, pero el público
entendió.”
“Rodolfo Alpízar
Castillo, padre de mi amigo
Rodolfo, habló en contra de la pena de muerte que el nuevo proyecto no combate. O sea, no se reconoce el derecho
y respeto a la vida manteniéndose la pena
de muerte. Rodolfo hizo alusión al fusilamiento, tras un juicio “sumarísimo” e injustificado
de tres jóvenes, quienes el 11 de abril de 2003 intentaron secuestrar la lancha
''Baraguá'', que hacía el trayecto entre Regla y La Habana Vieja, con el fin de
llegar a Estados Unidos.”
“Varios asistentes mencionaron
que el asunto de la unión y matrimonio homosexual era un tema para distraer de temas aun más
importantes y que afectan a un sector
mayor o a toda la población cubana.”
El abogado Juan
Emigdio García Cuza criticó que el Partido Comunista (PCC) tenga un poder
absoluto por encima de la constitución y que necesitamos que Cuba llegue a ser un estado de derecho y de
respeto a leyes. Yo (Oscar) cité a José
Martí cuando escribió que la Carta Magna de una nación no debía ser construida ni con un ápice de ideología. Si se
incluye una ideología ya excluye y discrimina a
todos los ciudadanos de esa nación que no
comparten esa ideología. Por tanto, ese proyecto de Constitución NO ES UNA CONSTITUCIÓN.”
Oscar agregó:
La última Constitución
que tuvimos fue la del 1940 (Constitución que incluyó a todos los partidos,
entre ellos al partido comunista del momento).
Oscar preguntó a los
expositores:
- ¿Qué mecanismos tenemos los ciudadanos cubanos para poder tener una constitución?
- ¿Cuándo el pueblo cubano va a poder elegir y escoger entre varias opciones, porque desde el año 1952 en que Batista tomó el poder, el pueblo cubano ha estado sometido a lo que nos dicta el gobierno?
- “¿Qué habrá que hacer para que nadie, ni el PCC, ni siquiera el presidente esté por encima de la ley?”
Agregó que:
“Miguel
Díaz-Canel personalmente y en un video de “campaña” violó la ley, cometió delito al hacer campaña negativa contra los
opositores y candidatos independientes
que intentaron ser elegidos como delegados del
poder popular todo esto junto con la Seguridad del Estado (según la ley electoral actual, ningún ciudadano puede hacer
ni campaña positiva en su bien ni
negativa de sus competidores, y esto es penado por la ley. En muchos otros países
existen mecanismos para destituir incluso llevar
a prisión a presidentes si violaron la ley o por abuso de poder, por corrupción, etc.”
Este proyecto de Constitución, en lugar de darle una nueva ley a la República, la deja sin ley alguna. En lugar de proteger a sus ciudadanos, los deja totalmente desprotegidos.
El nuevo proyecto, al
igual que el presidente, NO HA TENIDO EL APOYO POPULAR que se necesita para
hacerlo válido. No es siquiera un panfleto útil (como lo ha sido el diario
Granma) para ser usado en cuestiones higiénicas después de ir el toilet. Las
múltiples asambleas populares realizadas como parte del circo mediático comunista
no han tenido el resultado que el régimen esperaba: el pueblo NO aprueba el
partido comunista único, NO aprueba el propuesto carácter “irrevocable”. NO
aprueba la censura a los artistas. NO aprueba la falta total de libre expresión.
NO aprueba a un presidente que no ha sido electo por el pueblo sino por un
partido.
EL PUEBLO NO APRUEBA.
EL PUEBLO NO APRUEBA.
Entiéndanlo de una
vez: Sin la aprobación popular, su nuevo proyecto de constitución NO ES VÁLIDO.
Jorge González
Un cubano más.
Un cubano más.
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